Microsoft nos advirtió en pasado que nuestro truco favorito para actualizar Windows había llegado a su fin, y ahora es oficial: los servidores de activación ya no permiten el uso de claves de licencia de Windows 7 y Windows 8 para activar Windows 10 o Windows 11.
Este cambio fue confirmado esta semana por The Verge, que había descubierto previamente que Microsoft no bloqueó de inmediato las claves de Windows 7 y 8 después del anuncio de la compañía el 20 de septiembre.
La muerte de la actualización gratuita era inevitable, por supuesto.
La oferta de Microsoft terminó oficialmente en 2016, justo un año después del lanzamiento de Windows 10.
Nadie esperaba que siete años después aún se pudiera usar la clave de licencia de una PC antigua de Windows para activar su flamante nuevo equipo para juegos en el 2023.
El tiempo dirá si las licencias de Windows 10 seguirán esta tradición. (Esperemos que sí).
Microsoft ha puesto fin al truco de utilizar claves de licencia de Windows 7 y Windows 8 para activar versiones posteriores de Windows.
La actualización gratuita desde estos sistemas operativos ya no es posible, lo que marca el cierre de un recurso ampliamente utilizado durante años.
Aunque esta era una evolución esperada, el recuerdo de la era de actualizaciones gratuitas seguirá vivo, mientras que la única opción gratuita restante es la actualización de Windows 10 a Windows 11, sujeta a ciertos requisitos de hardware.
El fin de una era, pero el legado continúa.
Por triste que sea este toque final de defunción, las cosas estuvieron bien mientras duraron.
Descansa en paz, maravilloso truco.